El Presidente Javier Milei tensionó aún más la relación con los gremios aeronáuticos este viernes, en el marco del paro por 24 horas en Aerolíneas Argentinas encabezado por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA( y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA). El vocero presidencial, Manuel Adorni, ratificó que quienes se sumen a la medida de fuerza serán «multados y sancionados» por la empresa.
Más temprano, Milei firmó el decreto que estableció la ya anunciada declaración de la aeronáutica civil comercial como servicio esencial, para ir por los derechos de los trabajadores a tomar medidas de fuerza. Para justificarse, la compañía estatal aseguró que el paro ya provocó 319 cancelaciones y afectará a más de 37 mil pasajeros. A eso se suma que el jueves despidieron a tres pilotos de la firma Embraer «de manera ilegal», según denunció APLA, porque «estaban cumpliendo una medida de acción sindical legítima». Además, el Gobierno adelantó que buscará excluir al titular de este gremio, Pablo Biró, de la próxima asamblea de la empresa.
En un comunicado, APLA denunció que el Gobierno firmó su desvinculación con «la clara intención de provocar, amenazar y amedrentar» a quienes ejercen el derecho de protesta, dado que la decisión se tomó cuando los pilotos se negaron a devolver una aeronave EMB-190 «como forma de reclamar un salario justo y acorde a las responsabilidades que se nos imponen».
«La violencia laboral que aplica la Dirección de Aerolíneas Argentinas utilizando el abuso de autoridad, la intimidación, la agresión, el maltrato y las amenazas generan un ambiente hostil que afecta a todos los trabajadores de la compañía», subrayaron. En ese contexto, alertaron que «el conflicto se agrava» y que seguirán peleando por la recomposición salarial «con todos los pilotos en sus puestos de trabajo».